- Ciclo
- Ciclo: Psychodrome
- Artista
- Tor-Magnus Lundeby, Ugo Rondinone, David Renaud i Hugues. Reip com a convidat especial.
- Fechas
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- Comisariado
- Grazia Quaroni i David Renaud
Última etapa de Psychodrome, el viaje a la turbación de la visión, de la percepción, de la conciencia, expresado con todos los medios sensoriales posibles, sin excluir perspectivas ni colores. En esta ocasión, la repetición es el principal punto de contacto entre los artistas en este momento presentes en el Espai 13, tras haber visto desfilar, a lo largo de los meses y de las diferentes etapas, la hipnosis, la visión, la conexión y la confusión de los sentidos. Repetición/variación es una fórmula ganadora en todos los tiempos, con un efecto desorientador garantizado. El tema obsesivo y obsesivamente repetido es uno de los componentes más destacados e inmediatos del efecto psicodélico, porque altera el espacio, el sentido de las proporciones, la dimensionalidad. Aquí se han reunido los medios de expresión más variados -vídeo o pintura, escultura volumétrica o instalación sonora, imagen real o construida-, en un buen ejemplo de cómo el artista contemporáneo puede manifestar y articular una problemática artística de mil formas diferentes, todas ellas interesantes a los ojos, los oídos, etcétera, del visitante. El loop, el círculo, sea vicioso o lineal, es una de las consignas de este siglo, un lenguaje procedente del vídeo pero que se puede extender a todas las prácticas artísticas. Ahí el territorio del infinito entra en un círculo, en ese terreno los extremos se tocan y el mismo espacio se puede percibir como infinitamente grande o infinitamente pequeño, envolvente o ilimitado.
Tor-Magnus Lundeby (Fredrikstad, Noruega, 1966, reside en Helsinki, Finlandia). Los temas de las instalaciones de Lundeby se inspiran en los mundos más variados. Desde los videojuegos hasta la astronomía, desde las carátulas de los discos hasta los mapas geográficos, todo puede convertirse en un pretexto para la construcción de un nuevo universo, de una cosmogonía fantástica. Sus pinturas están aplanadas en la bidimensionalidad y dan a veces la impresión de ser mapas geográficos, como un nuevo territorio por descubrir o explorar, o como un cómic con vocación de irrealidad. Sus instalaciones apelan a menudo al universo de la música, de los dj, de la "club culture", de las 45 revoluciones. Animado por el deseo de eliminar las fronteras entre las disciplinas, Lundeby extrae de ese universo una gran parte de su imaginario.
David Renaud (Grenoble, Francia, 1965, reside en París). Ya presente en Psychodrome 01, el trabajo de David Renaud concluye el recorrido, completa el círculo. Si lo que estaba en la base de las pinturas giratorias que ya conocemos era un elemento hipnótico, ahora el ojo se ve confundido ante el motivo envolvente de la pared, que transforma por completo su superficie: célula o satélite, imagen sideral o glóbulo infinitesimal, no lo sabemos. Microscópico y macroscópico pasan a ser dos conceptos que se fusionan y que no son en absoluto antitéticos. El motivo básico es una zona restringida, que se yuxtapone y se repite hasta cubrir todo el espacio. No se sabe si se trata de una fantasía generada detrás del ojo o de una representación artificial y codificada de la naturaleza, de orden cósmico o biológico. El espectador decidirá, y esa libertad suya es un factor importante en la obra.
Ugo Rondinone (Brunnen, Suiza, 1963, reside en Nueva York y en Zúrich). Mediante todo tipo de técnicas artísticas, vídeo, pintura y sonido, a menudo mezcladas en una misma obra, Ugo Rondinone presenta un universo que ha sido descrito como nebuloso, vacilante, circular, frágil y transitorio: elementos esenciales para confundir los trazos en plena lucidez. El visitante debe enfrentarse a un pequeño motivo y a una imagen repetida y descompuesta, pero, sobre todo, a la pura contradicción de pinturas circulares y anillos concéntricos: ya los habíamos visto en Delaunay o en Rauschenberg, pero ahora los contornos son difusos, están desenfocados. Una diana imprecisa: y si, como afirma el crítico francés Michel Gauthier, todas las obras de arte son una diana para el ojo, aquí el ojo y su función se someten a una dura prueba y son obligados a encontrar una nueva forma para la mirada. Objetivo alcanzado.
Hugues Reip (Cannes, Francia, 1964, reside en París). Una obra en vídeo de este artista francés constituye una aportación especial para Psychodrome. Se trata de Toon (<
Grazia Quaroni
Mayo de 2003
