Esta exposición de fotografías de Joaquim Gomis, gran amigo de Joan Miró, nos muestra el universo objetual y la revolución artística que representó el retorno de Joan Miró a Cataluña en plena posguerra española.
Las fotografías se tomaron entre 1942 y 1950, cuando Miró había vuelto a Barcelona tras pasar la Segunda Guerra Mundial en Francia y vivía de nuevo en su domicilio del pasaje del Crèdit, donde tenía también el estudio. En este espacio de trabajo guardaba objetos diversos que le fascinaba e inspiraban. Había objetos artesanales, pero también objetos orgánicos y animales, como por ejemplo cáscaras, plantas y flores secas, así como otros objetos encontrados. Todos ellos eran susceptibles de ser integrados en algún ensamblaje que el artista convertía posteriormente en esculturas articuladas o en esculturas de bronce.
Los primeros bronces los hizo precisamente en la Fundición Gimeno, donde podían encontrarse amontonados restos de esculturas de estilos que habían sido prevalentes en las primeras décadas del siglo pasado, así como bustos conmemorativos de los líderes del franquismo. Asimismo, en su estudio de Mont-roig de Camp, donde Miró pasaba largas temporadas, también se rodeaba de objetos que integraba en su universo de formas.
"Cuando cojo una piedra, es solo una piedra. Cuando Miró coge una piedra, se trata de un Miró." Joan Prats
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Lugar
Espai Mercè Sala, en el vestíbulo de conexión de las líneas L3 y L5 de la estación Diagonal
Fechas
Del 20 de octubre al 19 de diciembre de 2021
De lunes a viernes (excepto festivos), de 10 a 20 h
Precio
La entrada es gratuita
Con la colaboración de: