Hoy en día, hablar de accesibilidad no es solamente hablar de eliminar barreras arquitectónicas sino de sensibilizar a todos de que el arte y la cultura pueden experimentarse con todos los sentidos. La cultura es un derecho fundamental de las personas y los museos tienen la responsabilidad de facilitar su acceso. La Fundació Joan Miró trabaja para que todos los visitantes puedan participar de la experiencia artística. Por ese motivo dispone de:
- Programación de actividades inclusivas para un público diverso.
- Programación de actividades específicas para personas con discapacidades sensoriales o necesidades específicas.
- Personal formado para informar sobre las distintas posibilidades de visita y sobre los recursos de los que disponemos.
- Guía accesible de la Fundació o documento de anticipación de la visita.
- Bucle magnético en los puntos de información, el auditorio, la biblioteca y algunas salas.
- Lupas y materiales táctiles para personas con discapacidad visual.
- Ascensores y rampas para personas con problemas motrices. En algunos tramos los visitantes en silla de ruedas necesitarán la ayuda de una tercera persona.
- Sillas transportables, bancos y zonas de descanso en el interior del museo.
- Dos plazas de aparcamiento para personas con discapacidad.
- Descuentos en el precio de la entrada: gratuidad para las personas con tarjeta acreditativa de discapacidad y 50% de descuento para sus acompañantes. Con el baremo de necesidad de tercera persona, los acompañantes también tienen la entrada gratuita.
Además, los espacios del museo son accesibles con silla de ruedas y disponemos de una plaza pública de aparcamiento reservada a personas con movilidad reducida. También se puede llegar a la Fundació en transporte público accesible (autobús i funicular).